jueves, 23 de septiembre de 2010

Manifestación a través de las imágenes




Introducción


Manifestación a través de las imágenes


El dilema de la inexistencia del verdadero significado de las palabras o, incluso de las buenas personas, se ha vuelto recurrente en esta era que presume de modernidad e inteligencia.

Resulta difícil que una persona trascienda por sus hechos (pues el ego suele acabar con los fines más buenos), o porque el “ritmo” que te marca ese órgano fantasma (que cuando conviene está ahí, y cuando los fines políticos exigen su abolición no existe): la sociedad, te arrastra a la conducta:

-Estudiamos para poder trabajar y desempeñarnos en un empleo que ofrezca bienestar. En otro caso, trabajamos para satisfacer nuestras necesidades.

Pero ahí es cuando el significado de la palabra se ha perdido como la calidad humana de las personas, su esencia ha sido modificada, lo que nos ha orillado a confundir papeles e, incluso, sustituimos palabras para glorificar lo verdaderamente malo.
A lo que nos referimos es, si ese “bienestar” se traduce a una eterna cadena de sometimiento o adormecimiento de nuestros sentidos ante la verdadera realidad, y no aquella que sólo nos permite ver dentro de nuestros intereses o a escasos metros de nuestra área laboral, eso no puede significar “bienestar o satisfacción”

-¡No buscamos generalizar!

Al contrario, activistas, somos los más interesados en que este planteamiento quede en falacia y no sea el resultado de una Consulta Mitofsky. Pero ante este esquema que es evidente para los “desencajados”, resulta irónico cómo, por lo que tanto deseamos (hablando de intereses económicos, sociales, etc.) nos provoca tanto daño en lo que podemos denominar como: conciencia.

La ausencia de empatía hacia otros seres vivos, o no yendo más allá de la fantasía (pues la empatía exige de identificación mental y afectiva del “otro”), la ausencia de sentimientos por lo que ocurre alrededor, nos ha vuelto cínicos o vacíos.
No podemos concebir, que aún en esta era de “cambio”, de pleno reconocimiento de los derechos, donde la libertad de expresión ya no es un sueño, o un gobierno justo y democrático, ya no es un tratado utópico como “La ciudad del sol”, existan tantos crímenes de odio por parte de nosotros, “los de la misma especie”.

En la actualidad nuestra vida acelerada y el dominio del hombre, ha creado en nosotros una cultura errónea sobre la naturaleza y los animales, nos ha orillado a la falsa creencia de los poseedores y ser dueños de la tierra, agotando nuestros recursos y peor aún maltratando o sirviéndonos de los animales para satisfacer caprichos impuestos por la sociedad.

(...)

1 comentario:

Ansuve dijo...

Como dices bienestar la misma palabra lo explicaría
BIEN ESTAR, pero gracias a la sociedad neurótica en la que vivimos(sociedad de consumo), el bien estar se a traducido y entendido como el tener , el apoderarme el tener poder, dejando a un lado, lo importante que necesita el ser humano para vivir, un equilibrio en él, con los demás y con su naturaleza.

Poco a poco la gente deja de ver lo que importa de la vida pues ya no vive para eso ahora solo vive para consumir y acumular poder.

Lastima que esto solo lleve a un camino seguro...
la catastrofe!.